Reseña sin spoilers

 

Todo lo hablado es en el sentido de personajes, no de actores

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No creo hablar mucho sobre esta serie porque en realidad no hay mucho de qué hablar. Trama para adolescentes, que se contentan con cualquier cosa –ojo solo para los que les gustó-, humor negro vacío, personajes poco desarrollados, sensacionalismo por los cielos, guiones e historia inundada de acciones políticamente correctas. En simple palabras, no arriesga absolutamente nada.

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Desde los personajes que se presentan al inicio de la temporada hasta sus antagonistas, resultan ser una necedad de cómo traer una serie clásica y cómica, como lo fue Sabrina: La Bruja Adolescente de 1996, a un ambiente sombrío y supuestamente oscuro que termina siendo aburrido y nada interesante. Sabrina –muy bonita por cierto- que parece haber sido desbordada de acciones políticamente correctas, y que se ve flojamente reforzada por su  pelea entre su lado más humano y su lado más oscuro –bruja-, acaba por ser abrumadora y antipática. Sus amigas, al igual que ella, también no causan empatía. ¿Por qué? Una porque se explora de muy mala forma a los personajes que pudieron fácilmente haberse reemplazado con escenas que prácticamente estaban de relleno como las habladurías de Nicholas Scratch con Sabrina, o la bruja de los sueños y la inexplicable llegada de las trece brujas, quienes no tenían mayor, por no decir nada, relevancia en los primeros capítulos y llegan a ser la mayor pseudoamenaza al ser derrotadas, por un par de frases rebuscadas del latín, por la bruja más rebelde y poco estable en su posición como bruja: Sabrina. Harvey, el novio de Sabrina, un personaje absolutamente absurdo, sin relevancia y sin motivaciones que convenzan; está bien: el demonio que vio en las minas, su padre, alguien de carácter fuerte, su hermano son buenos pilares, pero no terminan de explorarlos bien y se quedan a medio camino, es más ni siquiera llegan. Luego sus tías, Hilda y Zelda, y Ambrose son los que salvan de algún modo la estabilidad de la serie. Ambrose ocupa el espacio vacío que deja Salem, de quien todo el mundo esperaba más que un solo ‘miau’; yo, en mi expectativa, esperaba de él su humor negro tan característico.

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Pero no todo es malo en The Chilling Adventures of Sabrina, hay aspectos que rescatar como el makeup, o las locaciones, muy bien hechas, que no son para nada desfavorables, excepto por la tan pero tan ridícula bruja de los sueños que parece haber sido interpretado y caracterizado por un niño poco especializado en el acto, que da más risa, al punto de la incomodes, que miedo.

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Por otro lado la fotografía, es la normal, como la de cualquier serie actual.

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En fin, El mundo oculto de Sabrina termina siendo una serie que se llega a terminar por la obligación de haber malgastado tu tiempo en ver alrededor de diez capítulos que no aportan mucho.

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En mi opinión, no recomendaría verla, a menos que tan solo quieras matar el tiempo y relajarte un rato. Después de todo es entretenimiento.

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CALIFICACIÓN: 1.8/5